El Licenciado en Administración Rural Juan Pablo Reinero, graduado de la UTN Facultad Regional San Francisco, compartió su experiencia como estudiante y profesional egresado de esta casa de altos estudios, y afirmó que “la Universidad me dio, además de la parte técnica de la carrera, herramientas que me sirven para la vida diaria, conocer gente, relacionarte, interactuar y eso me sirvió muchísimo y lo aprendí en la Facultad”.
“Además durante mi carrera hice muchos amigos que son mis amigos actuales. Hoy, ya pasados 10 años, con quienes veníamos a la Facultad nos juntamos todas las semanas a compartir una cena, y eso es muy valioso también. Para mí la época de la Facultad fue la mejor, inclusive mejor que la de la secundaria”, aseguró Reinero, de 35 años.
En relación al desempeño profesional de los egresados de la Licenciatura en Administración Rural, destacó que “en nuestra ciudad y la región hay muchas industrias relacionadas con el sector agropecuario en donde podemos desarrollar nuestra actividad, además, es una zona donde hay muchísimos productores, y uno los puede asesorar de modo privado o formar un equipo con otros profesionales para brindar un asesoramiento completo a determinado establecimiento o productor”.
Al referirse al camino transitado hasta completar su carrera de grado, Reinero explicó que “entre los 16 y 17 años, vivía con mis padres, iba al Colegio San Martín, y tenía un trabajo de medio día. Así que iba a la escuela la mitad del día, y luego, a trabajar. Cuando llegó el momento de terminar la secundaria me ofrecieron ampliar esa jornada de trabajo a ocho horas, entonces se hizo más difícil tomar la decisión de seguir una carrera universitaria o trabajar, hasta que lo pensé, lo analicé, y seguí con las dos: trabajaba seis horas, y a la noche, fuera de horario laboral, venía a la Facultad”.
“Cuando me enteré que se iniciaba la Licenciatura en Administración Rural, eso me entusiasmó a anotarme en el cursillo ya que llamaba estudiar algo relacionado al campo y sumado que en la secundaria teníamos una orientación contable, lo empecé, y me gustó el ambiente universitario, y ahí uno va empezando a notar el cambio con el secundario, uno es responsable de lo que hace y de lo que no hace, y así empecé mi carrera que me llevó unos siete años terminarla, la tesis me demoró y sobre todo el hecho de trabajar y estudiar al mismo tiempo me complicó un poco los tiempos de estudio”, añadió.
Reinero comentó que durante esos primeros años de su carrera “siempre trabajé en una actividad totalmente diferente a la faz agropecuaria o contable que era lo que estaba estudiando. Poco antes de recibirme conseguí otro trabajo, más relacionado al sector agropecuario, si bien la tarea no era puntualmente relacionada con mi carrera, ya estaba inserto en el rubro, y eso va llevando a que uno conozca gente, a relacionarnos con personas que trabajan en el sector. Comencé trabajando en administración de una empresa de maquinarias agrícolas, y después de que me recibí, en 2005, como la carrera ofrece una combinación de la parte contable con otra parte agronómica, mi interés estaba en profundizar mis conocimientos sobre la parte más técnica, más agronómica, y comencé a trabajar en una empresa que comercializaba insumos para el campo, semillas, fertilizantes, agroquímicos. Entonces ahí aprendí más en detalle la actividad agropecuaria, el espectro de los herbicidas, insecticidas, en qué momento se aplican, fechas de siembra, variedades de semillas, entre otras cosas. Siempre estuve ligado a la parte comercial”.
También indicó que actualmente se encuentra “trabajando en una empresa de maquinarias agrícolas, Akron, como responsable en la parte comercial dentro de una zona determinada, que es el sur de Córdoba. Hago asesoramiento y venta de los equipos a los productores que viven en esa región”.